la ultimavera
Hoy he visto bebés pato en el lago y a un segurata leyendo un libro (parece redundancia pero es importante especificar que era un LIBRO- no un folleto de instrucciones, ni el Metro, ni la ultima directiva sobre porras y otras armas reglamentarias de la UE), ingredientes que me convertirían de por sí en una persona más feliz si no fuese por los pequeños detalles cotidianos tales como:
- lluvia
- 10ºCelsius
- moda primavera: leotardos, abrigo, paraguas y muleta
Ésta ciudad es así, un invierno perpétuo. brrr.

Menos mal que vuelvo 4 días a Madrid, con mamá y las chics y la panda uni y pep que me va a dar un festín de sushi. umm.
He comenzado la rehabilitación, kinesioterapia que le llaman aquí, y va bien. Tengo un kine jovenzuelo y dicharachero (Fred) que es un solete por muchas perrerías que le haga a mi rotulita.
El lunes más.
DISCULPEN: la entrada lacónica, no estoy muy locuaz.
QUÉ BUENOS SON los de familia CAUDRON, que buenos son que nos llevan de EXCURSIÓN: a Breda, pa comprar medicinas. Xavi, nos tenemos que hacer la foto con la sombrilla.
ESCUCHANDO: voces, en mi cabeza. Dicen: 4 meses sólo quedan de martirio oficinesco. yiiiiija!